¿Alguna vez sentiste el deseo de poder utilizar tu celular durante la clase? Si es así, ¡leer este artículo llena ese deseo! Si bien no tener el celular durante la clase tiene sus beneficios, hay más ventajas en poder tenerlo durante la clase. Por ejemplo, se debería exigir a los estudiantes el uso de teléfonos móviles durante emergencias. Además, no poder usar el teléfono durante la clase supone una carga para los profesores.
Como muchos sabrán, los teléfonos celulares pueden usarse como una distracción para algunos niños si se usan incorrectamente. Sin embargo, si se usan de manera responsable, los maestros tenderían a permitir que los estudiantes usen sus teléfonos celulares durante las horas de clase para emergencias. Por lo tanto, a los estudiantes se les debe permitir usar sus teléfonos celulares durante la escuela porque pueden ser cruciales para la comunicación inmediata en situaciones de emergencia. Esto incluye permitirles comunicarse rápidamente con sus padres, autoridades u otras personas de confianza para informar una crisis, obtener ayuda o simplemente informar a su familia que están a salvo; Esto puede ser importante durante eventos inesperados como emergencias médicas, problemas climáticos o preocupaciones de seguridad.
Además, a los estudiantes se les debe permitir usar sus teléfonos celulares durante la escuela porque puede reducir parte de la carga para los maestros al tomar menos tiempo de aprendizaje. Hacer cumplir las reglas de los teléfonos móviles añade una tarea más a la larga lista de tareas pendientes de un profesor. Por ejemplo, cuando los profesores exigen a los estudiantes que guarden sus teléfonos móviles, eso consume tiempo de clase. Además, los estudiantes tienden a usar sus teléfonos celulares cuando no se les permite, lo que termina con el maestro pausando el tiempo de aprendizaje de otros individuos solo para disciplinar a otro estudiante.
En conclusión, los docentes deberían reconsiderar permitir que los estudiantes tengan acceso a sus teléfonos celulares durante los períodos de clase. Permite a los estudiantes tener la capacidad de comunicarse si ocurre una emergencia durante el horario escolar. En segundo lugar, puede aliviar una carga para los docentes.